Minimalista y moderna se presenta esta elegante proyección de cocina. Los frentes de metal auténtico en rosa dorado brillan suavemente en un dinámico juego de luces y reflejos. En combinación con armarios de pared en blanco porcelana mate se crea un acogedor ambiente claro y diáfano.
El color blanco sigue siendo una de las tonalidades más demandadas y ya no es posible imaginar un futuro sin él.
Las dos islas, unidas como si flotaran colgadas del puente de unión en castaño claro, ofrecen una superficie de trabajo excepcionalmente grande e invitan a cocinar en compañía de toda la familia y los amigos.
Una elegancia extravagante es lo que ofrece el nuevo programa metallico con su superficie de metal auténtico de un suave brillo. Una capa fina de aluminio laminado y un proceso de estampación especial confieren a la superficie una estructura insólita.